El viernes 24 de mayo, regresé por cuarta vez en esa semana, al instituto Julio Rey Pastor de Albacete, para tener el último de los encuentros programados, para este curso, con los alumnos de 1º, en esta ocasión, con la clase de 1ºA. He disfrutado mucho en los cuatro encuentros, los alumnos y alumnas son encantadores y me han demostrado, una vez más, que los jóvenes tienen una gran imaginación creativa, sólo hace falta trabajarla un poco de vez en cuando y dejar que circule libre por sus cabezas. Estoy especialmente agradecida a la profesora de lengua de los cuatro primeros de ESO, Leonor Gómez, sin su apoyo y confianza en mi novela “Jana y el misterio de los Libros Secretos”, estas charlas no hubieran sido posibles. Aquí están las fotos del momento.
Como hago siempre en los encuentros con los lectores, comienzo con una breve charla sobre la narración de historias reales o ficticias, contadas tanto de forma oral como escrita. De ahí paso a explicarles el proceso que lleva escribir y editar una novela como “Jana y el misterio de los Libros Secretos”, pues en este caso, se trata de un libro autoeditado, un proceso largo y muy arriesgado.
Tras la charla, doy paso al turno de preguntas. En esta ocasión, los chicos y chicas me hicieron muchas sobre la novela, los personajes, etc. A continuación, paso a explicarles una actividad de creación que siempre les propongo hacer en estos encuentros.
Los alumnos y alumnas estuvieron muy dispuestos en todo momento a participar.
La actividad dura unos pocos minutos, pues se trata de escribir sólo treinta palabras.
A continuación, los alumnos leyeron su textos de forma voluntaria.
Y, una vez más, los jóvenes me demostraron ser muy imaginativos. La lectura de sus textos siempre resulta muy divertida y didáctica.
Como siempre, el encuentro termina con la firma de ejemplares de “Jana y el misterio de los Libros Secretos”.
Aunque, antes de dar por finalizado el encuentro, los chicos me entregaron un montón de trabajos que colgaré en otra entrada en la sección de: “Dibujos de los lectores” y Leonor, la profesora, me tenía preparada una maravillosa sorpresa.
Un libro de cuentos del gran Oscar Wilde y un precioso cuaderno con flores y una hermosa hada. Un maravilloso detalle de Leonor, que me dejó casi sin palabras.
Muchas gracias, chicos, chicas y profesora, por hacerme sentir tan bien y por enseñarme un montón cosas.
¡HASTA SIEMPRE!
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